Había una vez un niño llamado Sam que vivía en el campo. Le encantaba pasar tiempo al aire libre, explorando la naturaleza y sus maravillas. Un día, mientras caminaba por su sendero favorito, vio algo extraño: ¡un regalo! Estaba envuelto en papel verde del que brotaban hojas y tenía su nombre escrito.
Curioso por saber qué podía ser este misterioso regalo, lo abrió lentamente y descubrió que dentro había un viejo bastón de madera con tallas de varios animales. En cuanto tocó el bastón, Sam sintió que algo mágico acababa de suceder: ¡se sintió conectado a la tierra que le rodeaba!
Al día siguiente, cuando Sam se despertó, llegó otro paquete a su puerta. Éste contenía un collar de oro con tres amuletos con la forma de la propia Tierra: masas de tierra rodeadas de agua. Cuando Sam se puso el collar, ¡se sintió inmediatamente más conectado a la Madre Tierra que nunca!
Este patrón de recepción de regalos continuó durante semanas hasta que, finalmente, una mañana Sam recibió una vieja carta dirigida sólo a él, sin remitente ni firma visibles en ningún lugar del sobre o de su contenido. En su interior había una nota manuscrita que le daba la bienvenida a «la familia» de personas que se dedican a preservar la belleza natural y la sostenibilidad de nuestro planeta para las generaciones futuras.
Sam supo enseguida lo que significaba: ¡la Madre Tierra le quería como embajador! A partir de entonces, cada mes llegarían nuevas cartas con historias sobre diferentes problemas medioambientales en el mundo y sobre cómo podemos ayudar a evitar que se repitan en nuestros propios patios. Con cada mes que pasaba aparecían también más regalos; cosas como libros sobre la conservación de la vida salvaje, semillas para plantar árboles, ¡incluso entradas para eventos especiales dedicados a educar a otros sobre la protección de nuestro medio ambiente!
Sam utiliza ahora todos estos recursos no sólo para educarse a sí mismo, sino también para compartir lo que ha aprendido con sus amigos y familiares, de modo que ellos también puedan contribuir a que vivamos de forma sostenible hoy y mantengamos la belleza de nuestro planeta mañana.
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