Sueño del mar
Dean era un niño con espíritu aventurero. Le encantaba aprender y explorar cosas nuevas, pero tenía un sueño especial: ver el mar.
Un día, Dean hizo un viaje fuera de la ciudad con su familia. Mientras conducían, empezó a imaginar cómo sería nadar en el mar o construir castillos de arena en la playa. Sus ojos brillaban al pensar en todo tipo de posibilidades emocionantes que le esperaban en la costa.
Cuando por fin llegaron a la playa, Dean no podía creer lo que veían sus ojos. La vasta extensión de agua azul se extendía ante él y las gaviotas bajaban en picado desde lo alto buscando comida en el oleaje que había debajo. Estaba hipnotizado por su belleza y sintió que le invadía una sensación de asombro, como si aquel lugar fuera algo salido de un sueño.
Los padres de Dean le animaron a quitarse los zapatos y sumergir los dedos de los pies en el agua fresca para divertirse en el patio de recreo de la naturaleza. Pero había una cosa que retenía a Dean: ¡no estaba seguro de cómo leer todos esos largos sonidos «e» escritos en los carteles que los rodeaban! Por suerte, los padres de Dean habían traído su libro de fonética gratuito para que pudiera practicar la lectura de esas palabras en voz alta mientras corría entre las olas con ellos.
Así que se quedaron hasta la puesta de sol, jugando, recogiendo conchas y aprendiendo a leer esos sonidos largos de la «e» con su fiel libro de fonética, mientras conversaban sobre la vida, creando recuerdos que perdurarán para siempre en el corazón de Dean.
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